Ramón Valdivia, director general de la Asociación del Transporte Internacional por Carretera (ASTIC), entra a formar parte del Comité Ejecutivo de Presidencia de la Unión Internacional de Transporte por Carretera (IRU). La presencia de Valdivia, que actualmente es miembro de la Comisión de Finanzas de la IRU, posiciona al sector español del transporte por carretera dentro de los órganos de decisión de esta organización mundial.
Su nombramiento, que se hará efectivo el 1 de enero de 2022, tuvo lugar ayer durante la reunión de los Consejos de Transporte de la IRU, tanto de Mercancías como de Pasajeros. Ramón Valdivia se convierte así en el único español que forma parte de la Ejecutiva de la IRU.
Durante la Asamblea General (AG) de esta organización mundial, que se celebra hoy en formato híbrido (presencial-online) con delegados de más de 100 países, se están debatiendo temas como la escasez de conductores profesionales a nivel mundial; la expansión del Convenio TIR en los corredores centroasiáticos; la implantación del eTIR; o las actuales tendencias en movilidad sostenible, fundamentalmente en lo que respecta al paquete de medidas europeo ‘Fif for 55’.
Sobre el primer punto, Valdivia explica que «la falta de conductores profesionales, tanto de pasajeros como de mercancías, es una prioridad para IRU desde hace años ya que no solo afecta al sector del transporte por carretera, sino a toda la economía a nivel mundial. Por eso, continuaremos trabajando para mejorar tanto sus condiciones laborales como la percepción que la sociedad tiene de estos imprescindibles profesionales, muchas veces “invisibles” para los ciudadanos».
«Un aspecto importante en el que la IRU ya está actuando en los mercados de transporte más importantes del mundo, como América del Norte y del Sur, Europa y Asia, es el establecimiento de los 18 años como edad mínima de acceso al carné de conducir de camiones, autobuses y autocares, algo que en España conseguimos el año pasado gracias al trabajo de patronales como ASTIC», añade el director general de esta patronal.
La AG de la IRU, que ostenta la máxima autoridad en esta organización, se reúne dos veces al año. Su misión principal es definir los objetivos prácticos estratégicos y políticos y discutir, adoptar y difundir la posición de la IRU en todos los asuntos relacionados con la política de transporte. Su órgano directivo es el Comité Ejecutivo de Presidencia, responsable de la dirección de los asuntos de la organización de acuerdo con los Estatutos y el Reglamento de Régimen Interior de la organización; de ejecutar las decisiones adoptadas por la Asamblea General, a la que también ayuda a realizar los objetivos de la política de transportes, así como los reglamentos y directivas de la IRU. Asimismo, decide sobre la creación de Comités Regionales y Comités de Enlace, que permiten a la IRU cumplir su función en todas las regiones del mundo; y sobre la creación de Grupos Operativos, Comisiones y Grupos de Trabajo.
El Comité Ejecutivo, que está compuesto por el presidente y nueve miembros (seis que representan al Consejo de Transporte de Mercancías y tres que representan al de Pasajeros), también es responsable de la administración financiera de la IRU; de admitir la entrada de nuevos miembros y de pronunciarse sobre exclusiones; y sus instrucciones son vinculantes para el Secretario General de la organización.
«Nuestro objetivo a corto plazo es ayudar a un sector tremendamente castigado por la crisis económica derivada de la pandemia del coronavirus. Una crisis que detuvo por completo la actividad de la mayoría de estas empresas en todo el mundo. Recordemos que el transporte por carretera, tanto de mercancías como de pasajeros, registró en 2020 una caída en su facturación de cerca de un billón de euros (un trillón de dólares americanos)», destaca Ramón Valdivia.
El objetivo de IRU es defender los intereses de la industria del transporte por carretera en todo el mundo ante los organismos públicos y privados y los medios de comunicación. A través de su red mundial de asociaciones nacionales, miembros de la organización, representa a los empresarios de autobuses, autocares, taxis y camiones, desde las grandes flotas hasta los autónomos. El epicentro de su trabajo es la facilitación del comercio mundial para lo que administra, gracias al mandato de las Naciones Unidas, el TIR, el único sistema de tránsito global.
La IRU trabaja en una verdadera alianza público-privada con la Comisión Económica para las Naciones Unidas (UNECE por sus siglas en inglés). Además, el Consejo Económico y Social de las Naciones Unidas le asignó el estatuto de órgano consultivo.
Ramón Valdivia es ingeniero industrial (especialidad energética) por la Escuela Técnica Superior de Ingenieros Industriales de la Universidad Politécnica de Madrid. Cuenta con más de 35 años de experiencia en el sector de la automoción, en las áreas de ingeniería, producción, servicio postventa, marketing y ventas, de empresas líderes como Nissan, ENASA (Pegaso) e Iveco, entre otras. Desde septiembre de 2012 es director general de ASTIC. También es director de la empresa de servicios de transporte SETIR y miembro de la Junta de Gobierno de la CEOE y del Comité Nacional del Transporte por Carretera.